Laura Esteban y Rafa Lucía: “La gente aquí es muy emprendedora, tienen creatividad e iniciativa y no tienen miedo”.

Entrevistas

Foto: M.F.

Laura te mira sonriente, con los ojos bien abiertos, casi sin pestañear responde con gestos ágiles y cortos, alargando la última vocal de cada palabra. Cuando las emociones se apoderan de ella se sonroja; sus mejillas se encienden cuando defiende con vehemencia una idea, cuando se indigna debido a un mal recuerdo o ante cualquier situación contraria a sus valores.

No soporta las desigualdades económicas y lucha a su manera contra las injusticias sociales, especialmente las de género. Trabajadora social de profesión busca incansablemente una explicación a los problemas. Rumanía ha sido su primera vez viviendo fuera de España y durante un año ha explorado un país que le ha cambiado la perspectiva sobre su vida.

Rafa escucha antentamente y reflexiona cada pregunta. Las respuestas son directas y pausadas, condimentadas con dejes madrileños “de barrio” como a él mismo le gusta definirse. Su experiencia de un año en Rumanía está ligada a las ruedas de su inseparable bicicleta que trajo con él desde España. Vivencias ligadas a los elementos, al frío, al viento, al calor y también al asfalto, a las carreras y a las zonas de una ciudad que ha recorrido a golpe de pedal. Es quizá por eso que sus respuestas se asemejan a un recorrido en bici, veloces en ocasiones y relajadas en otras.

Rumanía ha sido su segundo destino internacional. Vivió en Inglaterra durante su año de Erasmus hace casi una década. Sociólogo de profesión y amante de las actividades al aire libre une su experiencia en Rumanía a sus gentes y paisajes trazando asi un carril entre ambos por el que circulan sus recuerdos.

Ambos llegaron en septiembre de 2012 para trabajar durante un año en una ONG rumana que desarrolla varios programas con niños, jóvenes y adultos.

Laura-Aplicamos a un proyecto aquí porque toda la zona de Paises del Este me era muy desconocida y me pareció una buena oportunidad para descubrir su cultura. Me llamó la atención y me resultó exótico. Además, añade Rafa, echamos la solicitud y nos la dieron a la primera. Al principio nos quedamos pensando ¿Rumanía? y luego dijimos ¿por qué no?. A fin de cuentas en España hay muchos rumanos pero se sabe muy poco del país y eso nos animó aparte yo tengo un amigo que ha vivido seís años por los Balcanes, y había visitado Rumania y me dijo que era increible”.

L- ´´Decidimos venir juntos al mismo proyecto aunque también estábamos abiertos estar por separado pero tuvimos suerte y nos cogieron a los dos en el mismo proyecto en Bucarest. Lo que más nos atrajo fue el trabajo con niños. Nuestro proyecto es de diversidad cultural y acerca a los niños a gente de otras nacionalidades, por eso convivimos con gente de muchos países´´.

R“Concretamente nosotros nos ocupamos de dar a conocer la cultura española, enseñarles un poco el idioma a niños de colegios, hacemos animación clínica con adolescentes y niños en hospitales y también actividades de animación sociocultural con adultos en un centro de drogodependientes”.

Laura matiza: “Ha sido un trabajo muy variado y hemos tenido ocasión de conocer muchas escuelas y guarderías de la ciudad lo cual nos ha permitido conocer bastante bien Bucarest. Además en alguna ocasión hemos hecho desplazamientos puntuales a localidades cercanas para hacer talleres de animación sociocultural en colegios”.

Las primeras impresiones nada más llegar se agolpan, lo positivo y lo negativo se ponen en balanza y ambos hablan atropelladamente, casi a la vez, de lo que les sorprendió.

Laura- Llegamos a las 4 de la mañana, nos vino a recoger el coordinador del proyecto y recorrimos la ciudad de punta a punta hasta llegar a Berceni. Mi primera impresión fue que la ciudad era más bonita de lo que la pintan pero cuando llegamos a nuestro barrio en Eroii Revoluției…me decepcioné un poquito.”

Rafa- “Sí. La calle estaba llena de socavones, no había sitio para pasar porque había muchos coches aparcados y la entrada estaba rodeada de perros. Estuvimos dos días allí en ese apartamento y luego nos cambiaron a otro en Piața Sudului y la zona estaba mucho mejor; una zona muy tranquila sin casi tráfico y con un jardín de 20 metros en la puerta…¨. Rafa se para, reflexiona y tras una breve pausa añade:

Mi primera impresión de Bucarest fue mejor de lo que tenía preconcebido. Después te vas dando cuenta de que está todo muy viejo, muy destartalado. Mi impresión cambió totalmente cuando hicimos nuestro primer viaje fuera de la capital y pasamos por Sibiu, Sighișoara y toda esa zona. Viviendo sólo en Bucarest en una zona como la nuestra te cuesta imaginarte que existan ciudades tan bonitas”.

A la hora de adaptarse al país ambos consideran que no han tenido grandes dificultades. Les ha costado casi más acostumbrarse a la dureza del invierno rumano que al modo de vida. Creen que el conocer gente, hacer cosas nuevas, estar abierto a propuestas y explorar lugares diferentes les ha facilitado la adaptación.

L- No sentimos que nos haya costado mucho adaptarnos”. Rafa observa atentamente a Laura, mientras asiente con la cabeza.

R– “A mí lo que me ha costao ha sido el invierno y el frío. Eso me ha matao.Yo soy una persona de calle y me encanta entrar y salir así que en invierno lo pasé fatal. Por lo demás no, porque al venir de Madrid que es una ciudad y llegar a Bucarest que también es una ciudad no se nota tanto cambio. El ocio es muy parecido al de Madrid. Lo mismo si nos hubiera tocado un proyecto en la zona rural habríamos notado más las diferencias y quizás la adaptación habría sido diferente¨.

L- Es verdad lo que dice Rafa, además aquí también al igual que en Madrid hay mucha oferta cultural pero al no dominar el idioma es cierto que te pierdes muchas oportunidades de disfrutar más de las actividades culturales, como un teatro por ejemplo. Me sorprendió positivamente la cantidad de actividades callejeras que hay”.

R- “En Madrid también hay cosas similares pero tu vida allí se organiza de otra forma. Quedas con tus colegas, a veces te quedas en tu barrio, pero aquí al no tener ese apoyo de amigos, al no conocer mucha gente tienes que buscar planes para poder socializar y llenar tu tiempo de ocio porque no tienes a tus amigos de toda la vida para tomarte una cerveza. Y en este sentido estás más abierto a hacer cosas nuevas y diversas, a ir a más eventos”.

L “Como por ejemplo al cine. Lo bueno es que aquí al estar todo en versión original podíamos ir no sólo a películas españolas sino también a festivales de cine internacionales y ver otro tipo de cine. Luego hemos tenido suerte de ir conociendo gente española que ya llevaban tiempo viviendo aquí y que nos han ido introduciendo un poco en la cultura, enseñando otros lugares y otras cosas”.

R- Bueno sí y también rumanos que hemos ido conociendo y que nos han ayudado a entender más el país y la cultura.

L-Para mí la adaptación ha sido bastante fácil. Lo que más nos ha ayudado en este sentido ha sido sobre todo tener cosas que hacer tanto en el trabajo como fuera de él. Sobre todo yo díria que explorar por tu cuenta apuntándote a cosas por ejemplo yo me apunté a clases de salsa y Rafa a escalada en un rocódromo. Explorar la ciudad también ayuda a familiarizarte con el espacio, con la forma de vida y el ritmo. Nosotros hemos ido a veces en bici, Rafa más que tiene más afición, pero ha sido una forma de ver la ciudad y la forma en que se vive, desde otra perspectiva. Explorar ambientes diferentes, salir con gente que vas conociendo, hacer distintos planes, ir a bares nuevos.. ¡Teterías! interrumpe Rafa, “Aquí hay unas teterías muy chulas que fuimos descubriendo gracias a una chica rumana que es traductora y que nos iba enseñando cada día una y es algo que nos encantó¨.

L-“Yo lo que he echado de menos y se lo comentaba a Rafa al principio, son más centros sociales con actividades culturales como por ejemplo conciertos, talleres, lecciones de cosas pero todo aunado en un centro gestionado de forma comunitaria. He echado de menos un poco más de tema organizativo a nivel social, autogestionado como “La Tabacalera” en Madrid. Supongo que estarán aún al principio…no sé, pero lo he echado en falta¨.

R- ¨Claro que… es posible que existan y no nos hayamos enterado porque al no dominar el idioma…¨.

Ambos- “Sí ese es uno de los obstáculos porque aunque sea una lengua latina tiene sus influencias de otras lenguas y es complicado aprenderlo. Puedes leer cosas pero no acabas de enterarte 100%. Como mucho te haces una idea general pero no es suficiente”.

R-“A mí por ejemplo me ha ayudado mucho para adaptarme y conocer gente el salir con la bicicleta y charlar con otros ciclistas, así es como más rumanos he conocido. Además la comunidad de ciclistas es grande y hay muy buen ambiente. Luego también es verdad que hay bastantes diferencias en algunas cosas. Por ejemplo, interviene Laura, “ He notado que las diferencias de género están más marcadas aquí y es una cosa que me llamó la atención¨¨. Rafa continúa, “Sí, las relaciones entre géneros son más díficiles aquí, vamos me refiero a las relaciones de amistad entre chicos y chicas, me parecen diferentes y más difíciles aquí¨.

L- Asintiendo, “Yo también lo he percibido así. Y lo he notado no sé, como una diferencia cultural que te choca. Por ejemplo como en el tema de los saludos que entre chicos se den la mano y a tí no te digan nada…eso me ha hecho sentirme excluida en algunas ocasiones. Aunque entiendo que es una cosa cultural no puedes evitarlo y acabas por no sentirte en igualdad de condiciones”.

Tras un año, cuando su proyecto está casi acabando, ambos reflexionan sobre lo que más y menos les ha gustado del país.

R- (riendo): ¨A mí me ha encantado la primavera jajaja¨.

L- (suspirando) ¨¡ufff ! A mí tantas cosas pero…diría que la cercanía de la gente. Me ha sorprendido que a la gente le guste tanto España y lo mucho que se sabe sobre el país. Luego hay cosas que no es que no nos hayan gustado necesariamente…¡umm!..digamos que las hemos echado en falta por ejemplo los servicios públicos de barrio, un polideportivo, una piscina o una biblioteca en el barrio algo que sea acccesible en cualquier barrio y no te tengas que ir al centro para acceder a todas estas cosas¨.

No me ha gustado la falta de infraestucturas y de servicios públicos al alcance de todos y para todo tipo de rentas.Tampoco me ha gustado la diferencia entre barrios por ejemplo si te vas a un centro sanitario de un barrio digamos como Ferentari las condiciones son mucho peores que las de otros barrios. No me ha gustado que el personal que se ocupa de los niños no esté cualificado o que no sepan tratar con niños y que la educación esté tan mal pagada. Conocí a una profesora de educación infantil que cobraba 200 euros al mes y tenía que hacer dos jornadas para completar su salario.Y eso es algo que no me ha gustado.

En general me refiero a las diferencias sociales tanto de barrios como de oportunidades de acceso a servicios. Soy consciente que es algo que pasa en todas las grandes ciudades pero aquí, comparándolo con Madrid lo he visto más marcado. Al trabajar día a día en escuelas y hospitales por toda la ciudad, en zonas desfavorecidas lo ves más que el que está en su empresa y no es tan consciente de este tipo de cosas”.

R- “Hay muchas otras cosas en cambio que nos gustan. Como que aquí la gente tiene muchas inquietudes, es muy emprendedora y tienen mucha imaginación, creatividad e iniciativa y no tienen miedo. Por ejemplo, casi todos mis amigos ciclistas a pesar de ser muy jóvenes se les ocurrió una idea y crearon su propia empresa, eso es de admirar”.

L- Si es cierto que son muy echaos pa´lante, en España no es así, somos más apalancados, de quedarte en casa de tus padres hasta los 40, de tener menos iniciativa. Bueno lo de quedarse en casa aquí tambien pero por otras circunstancias, por falta de medios, porque están recien casados, no sé por otras situaciones. Por ejemplo en España se oye mucho eso de “ yo por menos de x dinero no trabajo que gano más en el paro” una cosa que aquí nunca he oído¨.

Y además son muy currantes. Los rumanos son muy trabajadores y echan muchas horas, en parte entiendo que es también algo forzado para poder llegar a fin de mes pero…nos parece que son muy trabajadores. Por otro lado creo que la gente a lo mejor se ha conformado porque es lo que les toca y echo en falta más queja social¨.

R- Yo en cambio estoy viendo mucho movimiento reivindactivo por lo menos en los ciclistas. Mucha campaña, reivindación de espacios y derechos.”

L- Quizá es que no nos hemos enterado de como van las cosas por el poco tiempo que llevamos, por lo que decíamos antes del idioma y nos perdemos cosas debido a esa falta de información”.

Ambos se consideran enriquecidos en lo personal y el lo profesional y se llevan de Rumanía algo más que un grato recuerdo.

L- Ha sido una experiencia increible porque ha sido la primera vez que he vivido fuera de España y ha sido muy enriquecedor para darte cuenta de tus propios límites o descrubir habilidades que desconocías. Te das cuenta de lo importante que es hablar un mismo idioma. Asimismo es muy importante tu actitud, el que estés dispuesto a arriesgarte a salir de tu casa, a hacer el esfuerzo de conocer la cultura y ponerte a prueba en otros contextos pese a que te cueste o no entiendas, también es parte del apredizaje”.

R-Personalmente, Rumanía me ha aportado mucho.Vivir un año fuera de tu país siempre aporta. Antes de venirme, pensaba que aunque no hagas nada especial ya has ganado simplemente por el echo de salir a ver y a experimentar otras cosas. El cambiar de medio te abre la mente y te aporta muchísimo. Profesionalmente me ha dado otra perspectiva sobre formas de trabajar, sobre el mundo de los proyectos europeos y eso me ha abierto los ojos a otras posibilidades laborales que no me había planteado y se nos han abierto puertas. Que las abramos o no luego sólo depende de nosotros.”

Laura completa lo que acaba de decir Rafa añadiendo: “se te ocurren nuevas ideas, nuevas formas de abordar las cosas.Va a ser raro volver a España con la incertidumbre de no saber que va a pasar y con la pena de dejar esto ahora que es cuando estás empezando a pillarle el punto”.

Mientras andamos hacía el metro hablan de sus preocupaciones, les inquieta el no saber que pasará, el saber si les costará retomar el ritmo de vida de España, si notarán cambios personales en sus relaciones con los amigos y familiares, si podrán volver a vivir por su cuenta como antes de dejar España o si deberán, como tantos otros, regresar a casa de sus padres, si encontrarán trabajo o les tocará hacer la maleta de nuevo.

Cae la tarde, anochece y seguimos hablando de planes, de ideas recordando buenos momentos y reflexionando sobre lo que les deparará el futuro. Ambos cierran la conversación y la noche con esta frase:Después de esta experiencia te das cuenta de que el mundo es mucho más grande y que no te puedes quedar ahí y que si no sales de tu casa te pierdes mucho. Saliendo te haces más tolerante y sobre todo mejor persona”.

Rafa y Laura regresaron a España en agosto, tal y como predijeron no pudieron volver a vivir juntos pero mientras edito esta entrevista me comunican que han encontrado un piso, que tienen varios proyectos entre manos, que siguen dándole vueltas a unas cuantas ideas y que echan de menos Rumanía.

3 thoughts on “Laura Esteban y Rafa Lucía: “La gente aquí es muy emprendedora, tienen creatividad e iniciativa y no tienen miedo”.

  1. Una pareja simpática que se ha asomado a Romania y se van llenos de buenos recuerdos que ayudarán a que se conozca este gran país y destruir los mitos que sobre ella existen en Europa.
    Volved pronto

  2. GRACIAS PAREJA , Y ME ALEGRO MUCHO QUE OS GUSTO MI PAIS YO TAMBIEN VIVI SERCA DE MADRID EN VALDEMORILLO DURANTE 8 AÑOS , QUE VUELVAN PRONTO POR SIBIU Y AVISEN POR FAVOR.

  3. Hola, Laura y Rafa, me alegro de encontrarlos nuevamente (!), viaje con ustedes este Julio de Galati a Iasi en camioneta (no se si se acuerdan :)), me alegro que todo parece haber pasado bien con su proyecto, les deseo mucha suerte en la vida y en su trabajo, gracias por visitar y trabajar en Rumania! Fue un placer conocerlos, un abrazo

Leave a Reply to Alex Cancel reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *