No queremos una nación de ladrones

360º

Foto: Inquam Photos / Octav Ganea

Tras nueve meses de pausa anoche se reanudaron las protestas en Rumania. Más de 20.000 personas protestaron anoche en Bucarest y en una treintena de ciudades del país así como en diez capitales europeas. Bajo el lema “No queremos una nación de ladrones” los protestantes se concentraron inicialmente en la ya simbólica Plaza de la Victoria, frente a la sede del Gobierno, y posteriormente iniciaron una marcha hasta el Palacio del Parlamento donde los protestantes se situaron de espaldas al edificio y abuchearon a los políticos durante varios minutos. Alrededor de las 22.00 de la noche terminaron las protestas. El ex primer ministro Dacian Cioloş y algunos miembros de la oposición participaron en las protestas algo que no había sucedido en anteriores ocasiones.

El motivo de las protestas es el nuevo proyecto de ley de reforma de la Justicia presentado el miércoles pasado por el Ministro de Justicia Tudorel Toader. Dicho proyecto contempla modificaciones de la ley actual que convertirían a la Justicia en un instrumento político, comprometiendo así su independencia.

El proyecto de ley, que se encuentra a la espera de ser debatido en el Senado, introduce varios cambios polémicos. Elimina al Presidente del proceso de nombramiento del Fiscal General de la Audiencia Nacional, Fiscal jefe de la Dirección Nacional Anticorrupción y Dirección para la Investigación del Crimen Organizado y Terrorismo así como a sus adjuntos que pasarían a ser nombrados por el Consejo Superior de la Magistratura a propuesta del Ministro de Justicia.

Asimismo el Ministro de Justicia podrá solicitar a las anteriormente mencionadas fiscalías información sobre su trabajo y dar instrucciones escritas sobre las medidas que deben tomarse para prevenir y combatir el delito de manera efectiva. El borrador también estipula que la Inspección Judicial del Consejo Superior de la Magistratura quede subordinada al Ministerio de Justicia.

Tudorel Toader justificó la medida invocando las disposiciones del Mecanismo de Control y Vigilancia de la UE y las “realidades judiciales” para enmendar las leyes de Justicia. El anuncio del proyecto de ley ha generado críticas de los magistrados, la sociedad civil, así como del presidente Klaus Iohannis, la embajada de los Estados Unidos y la Comisión Europea.

El Consejo Superior de la Magistratura (CSM) ha rechazado el proyecto de ley sobre la enmienda de las leyes de justicia, argumentando en su comunicado que “el trabajo de los tribunales no puede ser controlado por estructuras que son parte de del poder ejecutivo y que la propuesta del Ministro de Justicia viola las disposiciones constitucionales sobre la independencia del poder judicial y la separación de poderes del Estado”.

Además añade que “la mejora de los procedimientos actuales no se puede lograr haciendo hincapié en el papel crucial del Ministerio de Justicia y excluyendo del proceso al presidente de Rumanía, sino tal y como ha sugerido el CSM a lo largo de estos años limitando el rol del Ministerio de Justicia y dejando al CSM como garante de la independencia judicial “.

Por su parte el presidente rumano, Klaus Iohannis, expresó su preocupación por ser excluído del nombramiento de fiscales generales y matizó que la supeditación de la Inspección Judicial al Ministerio de Justicia ejercerá presión política en la labor de jueces y magistrados.

La Comisón Europea ha destacado el riesgo que este proyecto de Ley supone para la indepedencia de la justicia, recordando que no va en la línea de las recomendaciones remitidas durante la última evaluación del Mecanismo de Control y Vigilancia en la que se instaba al Gobierno a consolidar los progresos realizados hasta el momento.

A la polémica suscitada por este proyecto de ley se une la negativa del pasado lunes, por parte del Senado a aprobar una ley que evitaba que ciudadanos condenados penalmente pudieran ocupar el cargo de Presidente del Gobierno.

Protestas anteriores, cronología

Hace nueve meses se vivieron en Rumania las mayores protestas ciudadanas de los últimos 25 años. El detonante entonces fue otro polémico proyecto de Ley que beneficiaba a determinados cargos políticos encausados por delitos de corrupción y abuso de poder.

18 de enero 2017

  • Comienzan a circular en los medios de comunicación rumores de que se pretende aprobar un proyecto legislativo que podría beneficiar a determinados cargos políticos encausados por delitos de corrupción y abuso de poder. A tenor de estos rumores unas 5.000 personas salen a protestar en toda Rumanía.

22 de enero 2017

  • Los ciudadanos a través de las redes sociales comienzan a organizar protestas en contra de este proyecto de ley. Ese día 30.000 personas protestan en Bucarest.
  • Otras ciudades rumanas como Cluj y Timișoara se unen a las protestas.
  • Se organizan las primeras manifestaciones solidarias en Dinamarca, Noruega, Francia y Londres.
  • Las televisiones afines al gobierno comienzan a desacreditar las protestas.

29 de enero 2017

  • Más de 90.000 protestan en todo el país que se ha denominado mayor protestas de los últimos veinte años.
  • En Bucarest 50.000 personas marchan pacíficamente recorriendo la Agencia Nacional Anticorrupción, la sede del Partido Social Demócrata y para terminar concentrándose en la sede del Gobierno en la Plaza de la Victoria.
  • Se solidarizan con Rumanía los inmigrantes de Bélgica, Francia, Reino Unido, Italia y Dinamarca.

30 de enero 2017

  • El Ministerio de Justicia organiza un debate público relativo al proyecto de Decreto Ley. Se decide modificar la variante inicial del Decreto y que en función de ello se verá si el Decreto será adoptado directamente por el Gobierno o será llevado al Parlamento.

31 de enero 2017

  • A medianoche el Ministro de Justicia, Florin Iordache, anuncia que el Decreto Ley número 13 ha sido aprobado y posteriormente publicado ya en el Boletín Oficial del Estado. Entran en vigor muchos de sus artículos si bien el más polémico de todos, que despenaliza los casos de corrupción siempre que el perjuicio al Estado no sea superior a 44.000 euros, no entrará en vigor con efecto pleno hasta transcurridos 10 días.
  • Los rumanos toman las calles pidiendo la retirada del Decreto y la dimisión del ministro. En Bucarest protestan 15.000 personas frente a la sede del Gobierno. En las principales ciudades del país también se sale a la calle a protestar. En Cluj protestan 10.000 personas, en Timișoara 2.500 y en Iași y Sibiu dos mil respectivamente.

1 febrero 2017

  • Más de 300.000 personas en todo el país se manifiestan en contra del Decreto, 150.000 de ellos en Bucarest.
  • En Bucarest la protesta se salda con pequeños incidentes violentos provocados por un grupo de ultras del fútbol. La policía interviene con gases lacrimógenos.
  • Miembros de la oposición protestan en el Parlamento pidiendo la dimisión y anunciando una moción de censura.
  • Embajadores de más de seís paises y la UE condenan lo sucedido y piden explicaciones al Gobierno rumano.

2 de febrero 2017

  • El Ministro de Justicia anuncia que no va renunciar al Decreto Ley.
  • El presidente Klaus Iohannis insta al Tribunal Constitucional a pronunciarse en el conflicto de intereses surgido entre el poder ejecutivo y el judicial tras las modificaciones que introduce el Decreto Ley.
  • Tercer día consecutivo de protestas en todo el país 220.000 personas salen a las calles en las principales ciudades.
  • Los policías apostados en la inmediaciones de la sede del Gobierno dan flores a los manifestantes tras haber recibido ellos también de los niños  presentes en la Plaza. A partir de ese momento será frecuente, en días sucesivos, ver policías con flores en la solapa de los uniformes.

3 febrero 2017

  • Cuarto día consecutivo de protestas 330.000 personas se manifiestan en todo el país, 150.000 en Bucarest. La ironía y el sarcasmo son la nota predominante en las protestas. Se caricaturizan declaraciones y personajes políticos.

4 febrero 2017

  • Quinto día consecutivo de protestas. En Bucarest se organiza la Marcha de los Niños frente a la sede del Gobierno.
  • 40.000 personas forman una cadena humana de 3.5 km alrededor del Parlamento.
  • El primer ministro anuncia la retirada del Decreto Ley.
  • Por la noche se concentran 180.000 personas en la Plaza de la Victoria y otras 170.000 en el resto de ciudades.
  • Bulgaria y República de Moldavia secundan las protestas en solidaridad con Rumania. En España los inmigrantes se movilizan y protestan en Madrid y Barcelona frente a Embajadas y Consulados.

5 febrero 2017

  • Se deroga oficialmente el Decreto Ley tras una sesión urgente del Consejo de Ministros.
  • Se hace pública el acta de la sesión de Gobierno en la que se decidió la aprobación del Decreto Ley.
  • Pese al anuncio de la retirada continuan las protestas. Más de medio millón de personas se manifiesta exigiendo la dimisión del Gobierno en todo el país 300.000 en Bucarest. Se convierte en la manifestación más grande de los últimos 25 años.
  • A las nueve de la noche los manifestantes de las principales ciudades del país encienden las pantallas de sus teléfonos móviles en un gesto simbólico de unión.
  • En Timișoara los manifestantes adoptan un manifiesto que pretende evitar que los políticos con causas penales pendientes no puedan ocupar cargos públicos.
  • casi 3.000 personas organizan frente al Palacio Presidencial de Cotroceni una contramanifestación de apoyo al Gobierno en oposición a las peticiones de dimisión de los protestantes de la Plaza de la Victoria. El Partido Social Demócrata desmiente que ellos las hayan organizado y afirman que es espontánea.

Fuentes: Medios de Comunicación rumanos, informaciones propias y Wikipedia

 

 

1 thought on “No queremos una nación de ladrones

  1. Viendo el panorama político en países de la UE estas Navidades podríamos comer “CHORIZOS” , creo que tendríamos para alimentar a TODA EUROPA.
    Aúpa con las denuncias Hispatriados

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